martes, 20 de mayo de 2008

jueves, 8 de mayo de 2008

V salón de Dibujo Tránsito y Permanencia

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V Salón de Dibujo Tránsito y Permanencia, dedicado este año a Bernabé Crespín, se instalo en la Sala Nacional de Exposiciones Salarrué, en el Parque Cuscatlán de la capital.

Se presentaran obras del homenajeado junto a artistas como Dagoberto Nolasco, Miguel Martino, Ricardo Clement, Boris Ciudad Real y Rosario Moore —la única mujer—, entre otros.

Según Augusto Crespín, coordinador del salón, este año la temática es la “Imaginación latente” dado que “la carga imaginaria en el arte es la madre de la creación”. Agrega que esta será una buena oportunidad para conocer la obra gráfica más reciente del autor.

En un texto escrito por Bernabé e incluido en el catálogo que acompaña la exposición se lee: “La sociedad nos llena de amargura, vivimos en este marasmo desordenado y compartimos esta jungla llena de demonios. Por la conducta negativa de nuestros semejantes, llenos de codicia y ambición tenemos motivos para expresar por medio del dibujo estas actitudes”.Que bien por la continuidad de mantener latente el proyectar el dibujo en nuestro medio mas sin embargo habría que valora algunos aspectos pue s hoy en dia ,resulta indispensable que el receptor de una obra de arte cualquiera opere con criterios actualizados ,porque solo asi sabra que la maravilaosa generosidad de dicha obra reside en su pulifuncionalidad ;es decir ofrece varias lecturas y es suceptible de varias valoraciones

Hay quienes siguen optando por identificar al dibujo con la primacía de la línea, y a la pintura con el predominio del color. A tono con lo especificado por Charles Baudelaire en el siglo XIX, el rasgo distintivo del dibujante puro reside en la fineza, incompatible con la pincelada. Y el color no excluye al gran dibujo, sino «al dibujo detallista, la minucia de los pequeños fragmentos, donde la pincelada siempre devorará a la línea».
Con arreglo a tales fundamentos, a los pintores sería inherente el brochazo más suelto, desbordado; y los pigmentos vivos, contrastantes. En tanto a los dibujantes sería consustancial la paleta austera y la pincelada lamida, que no desbordan el espacio delimitado por las líneas de contorno. Pura taxonomía.
Eludiendo hasta cierto punto el dogma sectario, Baudelaire no desestimó la posibilidad de que en un mismo artista visual convergieran el colorista y el dibujante: el primero, por el dominio de las «grandes masas»; el segundo, en virtud de la «lógica completa del conjunto de líneas». Y su sentencia fue tan categórica como ponderada: «siempre una de cualidades absorbe detalles de la otra».
Invito a que visiten la muestra y hagan sus propias reflexiones .Para tomar el camino creativo ,el artista del dibujo deberá asumir su tarea mas difícil:gestar un tema propio mediante una iconografía original o carateristica,tarea que muy pocos dibujantes han cumplido